Guía para una soldadura segura: prevención de riesgos y consejos prácticos

  • 26.03.2024

Guía para una soldadura segura: prevención de riesgos y consejos prácticos

La soldadura es una habilidad valiosa en muchos sectores industriales, pero conlleva importantes riesgos de seguridad. Para soldar de manera segura, es crucial comprender e implementar medidas preventivas contra arcos eléctricos, riesgos de electrocución y quemaduras. Esta guía paso a paso tiene como objetivo proporcionar a los soldadores, tanto experimentados como novatos, el conocimiento y las prácticas necesarias para trabajar de manera segura.

¿Cuáles son los riesgos?

El disparo de arco, a menudo denominado "destello" por los soldadores, es un peligro específico de la soldadura que puede causar daños oculares graves y quemaduras en la piel. Este fenómeno se produce cuando el arco de soldadura emite luz intensa y radiación ultravioleta (UV) e infrarroja (IR). La exposición directa a esta radiación sin la protección adecuada puede provocar una "oftalmia de nieve", una afección dolorosa similar a las quemaduras solares pero que afecta a los ojos. Los síntomas incluyen una sensación de arena en los ojos, dolor intenso y, en casos graves, pérdida temporal de la visión. La piel expuesta al arco sin protección también puede sufrir quemaduras solares, que varían en gravedad según la duración y la intensidad de la exposición.

La electrocución es un peligro generalizado en la soldadura, debido al uso de electricidad para crear el arco de soldadura. El riesgo es particularmente alto en ambientes húmedos o si el equipo de soldadura está dañado. La electrocución puede ocurrir cuando la corriente eléctrica pasa a través del cuerpo, lo que puede causar quemaduras internas, paro cardíaco e incluso la muerte. Los soldadores deben usar equipos y herramientas debidamente aislados, evitar trabajar en condiciones húmedas o con guantes mojados y asegurarse de que todos los equipos se inspeccionen regularmente en busca de signos de desgaste o daños.

Y, por último, las quemaduras son uno de los peligros más comunes e inmediatos en la soldadura, como resultado del contacto con el arco, las salpicaduras de metal fundido y las superficies calientes. Las salpicaduras de soldadura pueden alcanzar temperaturas extremadamente altas y causar quemaduras graves en la piel expuesta. Del mismo modo, tocar piezas metálicas calentadas durante el proceso de soldadura puede provocar quemaduras por contacto. Las quemaduras varían en gravedad, desde quemaduras superficiales que afectan solo la capa superior de la piel, hasta quemaduras profundas que pueden dañar los músculos, los huesos y los nervios. La prevención implica el uso de equipos de protección personal adecuados, como guantes y ropa de protección, y la conciencia constante de los peligros potenciales en el entorno de trabajo.

¿Cómo puedes protegerte eficazmente?

1-    Equipo de protección personal (EPP)

Utilice siempre una careta  de soldar con un filtro adecuado para proteger sus ojos y cara del arco. Asegúrese de que el filtro tenga un tinte lo suficientemente oscuro para el tipo de soldadura que está realizando.
También use ropa hecha de materiales ignífugos, como cuero o telas especialmente tratadas. Las mangas largas y los pantalones sin puños evitan que se acumulen chispas.
Además,  se deben usar guantes de cuero especialmente diseñados para soldar en todo momento para proteger las manos de chispas, calor y salpicaduras de metal fundido.
Por último, en espacios confinados o mal ventilados, puede ser necesario el uso de protección respiratoria para protegerse de los humos tóxicos generados por la soldadura.

2-    Prepara tu espacio de trabajo

Asegúrese de que su espacio de trabajo esté bien ventilado para evitar la acumulación de humos nocivos y manténgalo bien organizado para minimizar el riesgo de tropiezos o contacto accidental con superficies calientes. Revise su equipo de soldadura con regularidad para detectar cualquier signo de desgaste o daño que pueda suponer un riesgo de descarga eléctrica. grietas o agujeros. Deje secar de acuerdo con las instrucciones del fabricante antes de lijar. 

3-    Técnicas que necesitas saber para soldar de forma segura

Manejo de electricidad 
La soldadura requiere el uso de electricidad para generar el arco que calienta y funde los metales. Sin embargo, el manejo inadecuado de la electricidad puede provocar riesgos de electrocución. A continuación, le indicamos cómo minimizar estos riesgos: 
-    Uso de equipos aislados: Asegúrese de que todos los equipos de soldadura, incluidas las abrazaderas, los cables y las herramientas, estén debidamente aislados. 
El aislamiento debe estar en buenas condiciones, sin grietas ni desgaste visible. 
-    Ambiente seco: Trabaje siempre en un ambiente seco. Evite soldar en superficies mojadas o en condiciones de alta humedad. La humedad aumenta el riesgo de electrocución al facilitar la conducción eléctrica. 
-    Use calzado aislante: Use calzado de seguridad aislante para reducir el riesgo de que la corriente eléctrica pase a través del cuerpo. 
-    Inspección regular: Inspeccione su equipo de soldadura con regularidad para detectar cualquier deterioro o daño que pueda representar un riesgo de descarga eléctrica.

Maestría del arco
El arco de soldadura es tanto una herramienta como un peligro potencial. El control adecuado del arco es esencial para una soldadura segura: 
-    Ajustes adecuados: Ajuste correctamente los parámetros de su equipo de soldadura, como el amperaje y el voltaje, para que coincidan con el tipo de metal y el grosor de la pieza de trabajo que se va a soldar. Los ajustes incorrectos pueden dar lugar a un arco inestable, lo que aumenta el riesgo. 
-    Técnica de soldadura: Utilice la técnica de soldadura adecuada para minimizar las salpicaduras de metal fundido y controlar el área afectada por el calor. 
Por ejemplo, la técnica de soldadura por puntos puede reducir la exposición al arco. 
-    Protección contra disparos de arco: Asegúrese de que usted y las personas que se encuentren cerca usen el equipo de protección adecuado para evitar la exposición a la radiación de arco dañina.

Posicionamiento

El posicionamiento durante la soldadura afecta no solo a la calidad de la soldadura, sino también a la seguridad del soldador: 
-    Distancia de seguridad: Mantenga una distancia adecuada entre usted y el arco para reducir la exposición a la radiación y a las salpicaduras de metal fundido. 
-    Postura de trabajo: Adopte una postura cómoda y estable que le permita controlar la soldadura sin exponerse a peligros innecesarios. Evite posiciones que lo pongan en contacto directo con piezas metálicas o equipos eléctricos. 
-    Uso de soportes: Utilice soportes o dispositivos de sujeción para mantener las piezas en su lugar, lo que reduce la necesidad de sujetarlas con la mano y disminuye el riesgo de quemaduras u otras lesiones. 

Al incorporar estas técnicas de soldadura seguras en su práctica diaria, puede reducir significativamente el riesgo de accidentes y lesiones. La seguridad en el lugar de trabajo comienza con una preparación rigurosa y la conciencia de los peligros, así como con la implementación de prácticas de trabajo diseñadas para minimizar esos riesgos.

4-    Primeros auxilios y procedimientos de emergencia
Todos los soldadores deben estar capacitados en primeros auxilios, especialmente para lidiar con quemaduras y descargas eléctricas. Ten siempre a mano un botiquín de primeros auxilios, que incluya tratamientos específicos para quemaduras. Y, por último, establecer procedimientos de emergencia claros para incidentes de soldadura, incluida la evacuación y la comunicación con los servicios de emergencia.

La seguridad de la soldadura requiere una vigilancia constante, una capacitación adecuada y un estricto cumplimiento de las mejores prácticas y estándares de seguridad. Siguiendo esta guía, puede reducir significativamente los riesgos asociados con la soldadura y crear un entorno de trabajo más seguro para usted y sus colegas.